La rentabilidad de una empresa depende de diversos factores: sus decisiones sobre gastos e inversiones, el destino que da a los recursos y la forma de decidir el financiamiento de sus operaciones. Todas estas acciones son parte de la gestión financiera empresarial.
Esta gestión se encarga de obtener y administrar los fondos de una organización, así como de supervisar su uso. Como ya hemos señalado, lo realiza con el objetivo de obtener la mayor rentabilidad.
Para ayudarte a comprender el valor de la gestión financiera en el éxito de tu empresa, hemos preparado esta guía. Abordaremos las diferentes herramientas con las que cuenta y la forma como minimiza los riesgos económicos.
Podemos decir que cada organización imprime en su gestión financiera su propia impronta, pero en todos los casos parten de los mismos fundamentos:
Como hemos señalado, la gestión financiera administra los activos de una empresa y aquellos recursos que se han destinado para reinvertir en sus nuevos proyectos. A la vez, evalúa el éxito de esas nuevas iniciativas.
Este éxito se mide en tres documentos principales, los cuales dan cuenta del crecimiento y del arraigo de los nuevos proyectos y de la empresa en sí misma.
Como hemos señalado, la gestión financiera empresarial es el grupo de acciones que planean, organizan, dirigen y controlan las actividades financieras de una organización. Su objetivo en conjunto es claro: maximizar todos los recursos de la empresa para obtener una mayor rentabilidad.
Dentro de una empresa, el gestor financiero es el gerente encargado de potenciar los recursos de la empresa y de orientar las mejores decisiones económicas. Entre los diferentes puesto que realizan estas funciones se pueden encontrar el tesorero, el CFO, el encargado de riesgos o el jefe de finanzas.
El rol del también llamado gerente financiero es fundamental en cualquier empresa. Podemos definir su función esencial como la de administrar de manera eficiente y estratégica los recursos financieros de la compañía.
El gestor financiero es el encargado de diseñar la estrategia económica de una empresa. Por ello, interviene en un papel de mediador:
Con el fin de realizar sus funciones, el gestor financiero realiza una serie de estudios de las finanzas de la organización. Con este fin, se vale de tres métodos: recopilación, interpretación y evaluación de datos económicos. A través de ellos, mide a grandes rasgos los ingresos, los gastos y las inversiones realizadas por la empresa.
De esta manera, mide el efectivo disponible, las variables en los precios de venta de los productos y servicios e, incluso, la salud financiera de la empresa.
Es el estudio e interpretación de la información contable de una empresa. Permite conocer su situación actual y anticiparse a sus comportamientos futuros. Se vale de los llamados estudios de ratios y otros indicadores.
Su finalidad es determinar tres factores:
Un gestor financiero sabe que la historia de una empresa se encuentra en sus balances contables. Allí se ubica la realidad económica y financiera de la organización. Esta biografía se expresa a través de estos indicadores (rentabilidad, endeudamiento, tesorería y rotación, entre otros).
A partir de estas razones, por ejemplo, el gestor financiero puede establecer si la rentabilidad es la adecuada o si es necesario realizar ajustes.
Una vez que se cuentan con los ratios financieros de la empresa, es posible realizar la valoración del conjunto de sus activos y darle un lugar dentro de su sector y competencia.
Esta valoración no solo considera el valor monetario de la empresa, sino variables como:
También estima factores muy específicos, tales como el valor de sus patentes o su mercado accionario. El conjunto de este valor es resultado de la gestión financiera.
Una empresa se ve sometida a dos presiones fundamentales: los gastos y la necesidad de efectivo para enfrentar compromisos, desde los sueldos hasta el pago a proveedores. A esta tensión se le conoce como flujo de efectivo. Una parte primordial de la gestión financiera es conseguir que sea suficiente y eficiente.
Una empresa debe cumplir en tiempo y forma con sus compromisos, si desea seguir operando. Para ello, la llegada de insumos, la presencia de trabajadores o el acopio de energía, factores involucrados en su funcionamiento, requieren de recursos frescos y oportunos.
Una empresa puede resultar rentable en el papel, pero incluso así, puede tener problemas para satisfacer su flujo de caja por diversos factores.
Para ser más eficientes en este aspecto, es fundamental aplicar estrategias como:
Conocer el ciclo de tu negocio: saber en cuánto tiempo se despacha y se cobra te ahorrará dolores de cabeza. De ese modo, conocerás los plazos en que se liquidan efectivamente tus recursos.
Actualizar tus estados financieros: mantén al día la contabilidad. Todo hueco y demora puede volverse en tu contra al contar, por ejemplo, con recursos que ya no están ahí.
Optimizar tu cobranza: ningún consejo es más sabio en este rubro. Agentes de cobro más diligentes y efectivos significan más recursos para tu negocio.
Dentro de los diferentes presupuestos que diseña la gestión financiera, el presupuesto de caja es uno de los esenciales. Permite conocer con antelación la disposición de efectivo. De este modo, posibilita la toma de decisiones en un periodo determinado.
El presupuesto de caja permite controlar y salvaguardar los recursos de los que disponemos en un periodo determinado (semanal, mensual, anual…) para destinarlos a un uso. Es por ello que su elaboración no es sencilla y requiere de un gran conocimiento de la operación de la empresa.
Esta rama de la gestión financiera se centra en identificar y evaluar las posibles amenazas económicas que enfrenta una empresa. Por otra parte, implementa estrategias para minimizarlas.
Sus objetivos primordiales son proteger el patrimonio y asegurar la estabilidad y el crecimiento económico de la organización.
A través de la gestión de riesgos financieros, toda empresa puede detectar y evaluar las amenazas económicas que pueden poner en peligro su sostenibilidad. Entre los más habituales tenemos los siguientes:
La gestión financiera debe adelantarse a las amenazas y minimizarlas a través de estrategias consolidadas. Podemos establecer tres grandes iniciativas que todo gestor financiero debe establecer para administrar estos riesgos:
Estas estrategias crean un piso estable desde el cual el gestor financiero puede desarrollar las medidas necesarias para minimizar riesgos económicos.
La tesorería es una figura esencial para la administración del gestor financiero. De ella depende el control de la liquidez de la empresa; es decir, que existan fondos suficientes para cumplir con las obligaciones y aprovechar las oportunidades a corto plazo.
El papel de la tesorería es la planificación de liquidez, factor esencial para mantener una operatividad sin interrupciones. Entre sus funciones podemos señalar:
Existen tres estrategias que la gestión financiera puede acometer para optimizar las tareas de la tesorería.
Todo excedente debe ser invertido en beneficio de la empresa. Resulta primordial que se busquen alternativas de alto retorno que permitan disponibilidad inmediata, en el caso de que se necesite liquidez.
En este sentido, recomendamos explorar alternativas financieras, como una caja de ahorro o instrumentos de inversión de probada liquidez.
La gestión financiera empresarial es la forma en cómo las organizaciones administran sus recursos y afrontan sus oportunidades. Se centra en la figura del gestor, encargado de administrar los recursos propios y ajenos de los cuales se vale una empresa para sus proyectos estratégicos.
La gestión financiera aborda las decisiones que la empresa debe tomar y las decisiones que debe afrontar para minimizar riesgos y aprovechar oportunidades.
Entre los aspectos que deben optimizarse en esta gestión financiera, tenemos la tesorería, un aspecto con el que en Kuspit podemos ayudarte.
Nuestra tesorería te ofrece los mejores fondos de inversión con los que gestionamos eficientemente los recursos de tu empresa. Una tesorería con transparencia, liquidez y rendimientos
Ponte en contacto con nosotros para que veamos cómo podemos beneficiarte con tu gestión financiera.